Su principal característica es la desesperanza, la visión negativa de sí mismo, del entorno y el futuro. Hay falta de deseo y de placer, ya no se tiene ganas de hacer las cosas que antes se disfrutaba. El mundo se visualiza a través de un lente, es decir parcialmente y el sujeto ve en todo lo que le sucede la confirmación de sus pensamientos. Es un trastorno del ánimo pero también se siente a veces a nivel corporal con síntomas como insomnio o hipersomnia (mucho sueño), perdida o aumento del apetito y/ o de peso, fatiga. Puede haber también sentimientos de culpa o inutilidad, pensamientos de muerte, dificultad para concentrarse y tomar decisiones. Si has tenido varios de estos síntomas o sensaciones durante un tiempo prolongado y está afectando varias áreas de tu vida es probable que necesites una ayuda profesional para superar este momento.
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Lic. Julieta Collazo.
